y ciertas mujeres que habían sido sanadas por él de espíritus malignos, y de enfermedades; como María, que se llamaba Magdalena, de quien habían salido siete demonios;
En verdad, en verdad os digo, que vosotros lloraréis y os lamentaréis, pero el mundo se regocijará: vosotros estaréis tristes, pero vuestro dolor se convertirá en gozo.