Y otras muchas cosas decían, blasfemando contra él.
¶Y los que pasaban le decían injurias, meneando sus cabezas,
Y he aquí que ciertos de los escribas decían dentro de sí: Éste blasfema.
Y cualquiera que dijere palabra contra el Hijo del hombre, se le perdonará; mas al que blasfemare contra el Espíritu Santo, no le será perdonado.
Y castigándolos muchas veces, por todas las sinagogas, les hacía fuerza para que blasfemasen; y estando sobremanera enfurecido contra ellos, iba en persecución de ellos hasta las ciudades extranjeras.