Miqueas morastita profetizaba en días de Ezequías rey de Judá, y habló a todo el pueblo de Judá, diciendo: Así dice Jehová de los Ejércitos: Sión será arada como un campo, y Jerusalem vendrá a ser montones de escombros, y el monte de esta Casa, como altos cubiertos de bosque.
¿Por qué has profetizado en el nombre de Jehová, diciendo: Esta Casa será hecha como Silo, y esta ciudad será desolada de modo que no haya quien la habite? Y congregóse todo el pueblo contra Jeremías en la Casa de Jehová.
ALEPH.- ¡Cómo se ha empañado el oro! ¡cómo se ha demudado el oro finísimo! ¡derramadas están las piedras del Santuario por las encrucijadas de todas las calles!
Por tanto, Sión, a causa de vosotros, será arada como un campo, y Jerusalem vendrá a ser montón de ruinas, y el monte de la Casa santa, como altos cubiertos de bosque.
Porque voy a juntar todas las naciones contra Jerusalem en guerra; y la ciudad será tomada, y las casas serán saqueadas, y las mujeres serán violadas; y saldrá la mitad del pueblo en cautiverio, mas el resto del pueblo no será cortado de la ciudad.