A lo que respondió: ¿Quién te ha puesto a ti por príncipe y juez sobre nosotros? ¿Acaso piensas matarme a mí como mataste al egipcio? Por esto Moisés tuvo miedo, y dijo: ¡Indudablemente se ha divulgado esto!
Y ACONTECIÓ que en uno de aquellos días, mientras enseñaba al pueblo en el Templo, y predicaba el evangelio, vinieron sobre él los jefes de los sacerdotes, y los escribas, con los ancianos,
¶ Hombres duros de cerviz e incircuncisos de corazón y de oídos; vosotros resistís siempre al Espíritu Santo: como hicieron vuestros padres, así hacéis vosotros.