(y ellos dijeron: ¡Señor, ya tiene diez minas!)
Y aun esto fué poco a tus ojos, Jehová Señor; pues que has hablado de la casa de tu siervo hasta en tiempos muy remotos; y ¿es ésta la usanza del hombre, oh Señor Jehová?
Y habiéndole llamado, le dijo ¿Qué es esto que oigo decir de ti? da cuenta de tu mayordomía; porque ya no podrás ser mayordomo.
Y dijo a los que estaban presentes: Quitadle la mina, y dadla al que tiene las diez minas:
porque os digo, que a todo aquel que tiene, le será dado; mas al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado.