Y dijo asimismo a éste: Sé tú también sobre cinco ciudades.
Decid al justo que le irá bien; porque del fruto de sus caminos comerá.
Y vino el segundo, diciendo: Tu mina, Señor, ha ganado cinco minas.
Y vino otro, diciendo: Señor, he aquí tu mina, la cual he tenido guardada en un pañuelo.
¶Por lo cual, amados hermanos míos, estad firmes, inmóviles, abundando siempre en la obra del Señor, sabiendo que vuestra obra no es en vano en el Señor.
El que planta y el que riega son una misma cosa; mas cada cual recibirá su propio galardón, conforme a su mismo trabajo.
¶Esto empero digo: El que siembra con mezquindad, con mezquindad también segará; y el que siembra generosamente, generosamente también segará.
¶Mirad por vosotros mismos, para que no perdáis el fruto de muestra labor, sino que recibáis un galardón cumplido.