Porque los diezmos de los hijos de Israel, que ellos han de ofrecer como ofrenda alzada a Jehová, yo se los he dado a los Levitas por herencia suya; por lo mismo he dicho respecto de ellos: No tendrán herencia en medio de los hijos de Israel.
Porque yo os digo, que si vuestra justicia no excediere a la justicia de los escribas y fariseos, de ninguna manera entraréis en el reino de los cielos.
GUARDAOS de hacer vuestra justicia delante de los hombres, con el fin de ser mirados por ellos: de otra manera no tenéis galardón de vuestro Padre que está en los cielos.
¶Y cuando ayunéis, no seáis como los hipócritas, de rostro austero; porque ellos demudan su rostro, de modo que sean vistos por los hombres ayunando. En verdad os digo: Ya tienen su galardón.
¶Y cuando oréis, no seáis como los hipócritas; porque ellos aman estar en pie orando en las sinagogas, y en las esquinas de las calles, para ser vistos por los hombres. En verdad os digo: Ya tienen su galardón.
¶Mas ¡ay de vosotros, fariseos! porque diezmáis la hierbabuena, y la ruda, y toda suerte de hortalizas; y pasáis de largo la justicia y el amor de Dios. Estas cosas deberíais hacer, sin desatender aquéllas.
De igual manera vosotros también, cuando hubiereis hecho todo lo que os es mandado, decid: Siervos inútiles somos; porque lo que era de nuestra obligación hacer es lo que hemos hecho.
porque el ejercicio corporal para muy poco es provechoso; pero la piedad para todo aprovecha, teniendo la promesa de la vida que ahora es, y de la que ha de ser: