Y cuando sopla el Austro, decís: Hará calor; y lo hace.
¿Sabes cómo se ponen calientes tus vestidos, cuando él sosiega la tierra con el Austro?
diciendo: Estos postreros han trabajado una sola hora, y los has igualado con nosotros, que hemos llevado la carga y el calor del día.
Mas cuando tú haces limosna, no sepa tu izquierda lo que hace tu derecha;