Y presentará de ello una de cada oblación, por ofrenda alzada a Jehová; lo restante será del sacerdote que rociare la sangre de los sacrificios pacíficos.
Toda ofrenda alzada de las cosas santas que los hijos de Israel ofrecieren a Jehová, las he dado a ti, y a tus hijos y a tus hijas contigo, como porción legal para siempre: pacto de sal es para siempre delante de Jehová, para ti y para tu simiente contigo.