¶Y sazonarás con sal toda oblación de tus ofrendas vegetales; y nunca dejarás que falte de tus ofrendas vegetales la sal del pacto de tu Dios. Con toda oblación tuya presentarás sal.
Toda ofrenda alzada de las cosas santas que los hijos de Israel ofrecieren a Jehová, las he dado a ti, y a tus hijos y a tus hijas contigo, como porción legal para siempre: pacto de sal es para siempre delante de Jehová, para ti y para tu simiente contigo.
¶Vosotros sois la sal de la tierra: pero si la sal hubiere perdido su sabor, ¿con qué será ella misma salada? No sirve ya para nada, sino para ser echada fuera y hollada de los hombres.