He aquí que como nubes subirá el asolador, y como torbellino, sus carros de guerra; más ligeros que las águilas son sus caballos: ¡ay de nosotros, porque somos dados a saco!
¡Ciertamente mi pueblo es necio, no me han conocido; hijos insensatos son, y no tienen inteligencia; sabios son para hacer el mal, pero nada saben de hacer el bien!
¡PON la trompeta a tu boca! ¡Cual águila viene el enemigo contra la familia de Jehová; por cuanto han traspasado mi pacto, y se han rebelado contra mi ley!
Sus caballos son más ligeros que leopardos, y más feroces son que los lobos nocturnos: sus jinetes se portan orgullosamente; también sus jinetes vienen de lejos: vuelan como águila que se apresura a devorar,
Luego alcé los ojos, y mirando, ví dos mujeres que salían fuera, y llevaban el viento en sus alas; y tenían alas como las alas de una cigüeña; y aquellas mujeres levantaron el efa entre la tierra y el cielo.
¶Porque nosotros también éramos en un tiempo necios, desobedientes, engañados, sirviendo a diversas concupiscencias y placeres, viviendo en malicia y envidia, aborrecibles, y aborreciéndonos los unos a los otros.