Por tanto, así me dijo Jehová: Si te volvieres, yo te restauraré, para que puedas estar en pie delante de mí; y si separares lo precioso de lo vil, serás entonces como boca mía: ellos deben volver a ti, mas tú no debes volver a ellos.
Sus sacerdotes hacen violencia a mi ley, y profanan mis cosas santas; no ponen diferencia entre lo sagrado y lo profano, y no hacen que se distinga entre lo inmundo y lo puro; y esconden sus ojos de mis días del descanso, y yo he sido profanado en medio de ellos.
Le mirará pues el sacerdote, y si viere que la hinchazón de la llaga es rojiza blanca en la parte calva, ya sea por detrás ya por delante, como la apariencia de lepra en la piel de su carne,