Dijo pues a su mozo: Ven, lleguémonos a uno de aquellos lugares, y pasaremos la noche en Gabaa, o en Ramá.
pasan ya el desfiladero; se alojan en Geba! ¡Ramá tiembla; Gabaa de Saúl se pone en fuga!
¶ ¡Tocad la bocina en Gabaa, y la trompeta en Ramá! ¡tocad alarma en Bet-aven! ¡mira tras de ti, oh Benjamín!
y Zela, Elef, y Jebús (la cual es Jerusalem), Gibeat, Y Kiryat: catorce ciudades con sus aldeas. Ésta es la herencia de los hijos de Benjamín, por sus parentelas.
Pero su amo le contestó: No nos desviaremos a una ciudad de gente extraña, que no es de los hijos de Israel, sino que pasaremos adelante a Gabaa.
Pasaron pues, y caminaron adelante; y se les puso el sol junto a Gabaa, que era de Benjamín.
Y también Saúl se fué a su casa en Gabaa; y fueron con él una compañía de hombres cuyos corazones Dios había tocado.