Y tenía treinta hijos, que cabalgaban en treinta pollinos; y tenían treinta ciudades, que se llaman Villas de Jaír hasta el día de hoy; las cuales están en la tierra de Galaad.
Y el rey dijo a Siba: ¿Qué quieres con estas cosas? Y respondió Siba: Los asnos son para que monte la familia del rey, y el pan y los higos secos para que coman los mancebos, y el vino para que beban los que se cansaren en el desierto.
¡Regocíjate en gran manera, oh hija de Sión! ¡rompe en aclamaciones, oh hija de Jerusalem! he aquí que viene a tí tu rey, justo y victorioso, humilde, y cabalgando sobre un asno, es decir, sobre un pollino, hijo de asna.
Jaír, hijo de Manasés, tomó toda la región de Argob, hasta el confín de los Gesureos y los Maacateos, y los llamó de su mismo nombre, Basán de las Villas de Jaír; nombre que dura hasta el día de hoy.)