Y con todo has dicho: Inocente soy; ciertamente su ira se ha apartado de mí. He aquí que estoy para entrar en juicio contigo, por cuanto dices: No he pecado.
Os digo que éste descendió a su casa justificado más bien que el otro: porque todo aquel que se ensalza, será humillado; mas el que se humilla, será ensalzado.