Luego tomará el sacerdote agua santa en una vasija de barro, y del polvo que hubiere en el suelo de la Habitación tomará el sacerdote, y lo echará en el agua.
Y ellos, cuando oyeron esto, salieron uno por uno, comenzando desde los mayores, hasta los postreros. Y Jesús fué dejado solo, y la mujer que se estaba de pie en medio.