Y respondiendo Pedro, dice a Jesús: ¡Rabbí, bueno es que nos estemos aquí! hagamos, pues, tres enramadas: una para ti, otra para Moisés, y otra para Elías:
Volviéndose entonces Jesús, y viendo que le seguían, les dice: ¿Qué buscáis? Ellos le dicen: Rabbí (que traducido quiere decir, Maestro), ¿dónde moras?
Éste vino a Jesús de noche, y le dijo: Rabbí, sabemos que eres un maestro venido de Dios; porque nadie puede hacer estos milagros que tú haces, a menos que Dios esté con él.
y vinieron a Juan y le dijeron: Rabbí el que estaba contigo más allá del Jordán, de quien tú has dado testimonio, he aquí que él bautiza, y todos van a él.