¡Súbete sobre un monte alto, oh Sión, anunciadora de buenas nuevas! ¡levanta con fuerza tu voz, oh Jerusalem, anunciadora de buenas nuevas! ¡levántala, no temas! ¡di a las ciudades de Judá: He ahí a vuestro Dios!
MAS ahora, dice Jehová que te creó, oh Jacob, y el que te formó, oh Israel: No temas; porque yo te he redimido; te he llamado por tu nombre; tú eres mío.
LAMED.- ¿Acaso nada os importa, a todos los que me pasáis de largo? ¡Mirad y ved, si hay dolor como el dolor mío, que me ha sobrevenido; con el cual Jehová me ha afligido en el día de su ira ardiente!
Y cuando hubieron tejido una corona de espinas, la pusieron sobre su cabeza, y una caña en su mano derecha; y doblando la rodilla delante de él, hacían burla de él, diciendo: ¡Salve, Rey de los Judíos¡
mirando a Jesús, autor y consumador de nuestra fe, el cual por el gozo que fué puesto delante de él, soportó la cruz, despreciando la vergüenza, y se ha sentado a la diestra de Dios.