Pedro empero se quedó junto a la puerta, por la parte de afuera. Salió, pues, aquel otro discípulo que era conocido del sumo sacerdote, y habló a la portera, y trajo adentro a Pedro.
¶Cuando, pues, hubieron almorzado, dice Jesús a Simón Pedro ¿Simón, hijo de Jonás, me amas tú más que éstos? Le dice: ¡Sí Señor, tú sabes que yo te quiero! Dícele: Apacienta mis corderos.