Subiste a lo alto; llevaste multitud de cautivos; recibiste dones entre los hombres, y entre los rebeldes también; para poder morar Jehová Dios en medio de ellos.
De cierto os digo, que muchas viudas había en Israel, en los días de Elías, cuando el cielo fué cerrado por tres años y seis meses, de manera que hubo grande hambre en toda la tierra;
Mas el Consolador, es decir, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo cuanto os he dicho.
Habéis oído cómo os dije: Yo me voy, y vuelvo otra vez a vosotros. Si me amaseis, os regocijaríais por cuanto me voy al Padre: porque el Padre mayor es que yo.
Mas cuando viniere el Consolador, a quien yo os enviaré desde el Padre, es a saber, el Espíritu de verdad, que procede del Padre, él testificará de mí:
Esto empero lo dijo respecto del Espíritu, que los que creían en él habían de recibir; pues el Espíritu Santo no había sido dado todavía, por cuanto Jesús no había sido aún glorificado.