E hicieron señas a los compañeros que estaban en la otra barca, que viniesen a ayudarles. Y llegándose ellos, llenaron ambas barcas, de manera que se iban anegando.
Mas él, haciéndoles seña con la mano para que callasen, les refirió cómo el Señor le había sacado de la cárcel. Y dijo: Haced saber esto a Santiago y a los hermanos. Y partiendo, se fué a otro lugar.
Y habiéndoselo permitido el tribuno, Pablo, estando sobre las gradas, hizo señal con su mano al pueblo: y, cuando fué hecho un gran silencio, les habló en lengua hebrea, diciendo: