En todo os dí ejemplo de cómo, trabajando así, debáis soportar a los débiles, y acordaros de las palabras del Señor Jesús, que él mismo dijo: Más bienaventurado es dar que recibir.
Por lo cual os hago saber que nadie, hablando por el Espíritu de Dios, dice: Jesús es anatema; y ninguno puede decir: Jesús es el Señor, sino por el Espíritu Santo.
YO Pablo os ruego, por la mansedumbre y la dulzura de Cristo, yo que en persona soy humilde entre vosotros, mas estando ausente, soy osado para con vosotros;
Porque conocéis la gracia de nuestro Señor Jesucristo, que, siendo él rico, por vuestra causa se hizo pobre, para que vosotros, por medio de su pobreza, llegaseis a ser ricos.
¶Porque vosotros, hermanos, habéis sido llamados a la libertad; sólo que no uséis vuestra libertad para dar ocasión a la carne; sino antes, por medio del amor, servíos los unos a los otros.
teniendo buen testimonio en cuanto a buenas obras: si hubiere criado hijos, si hubiere hospedado a los extranjeros, si hubiere lavado los pies de los santos, si hubiere socorrido a los afligidos, si hubiere seguido estrictamente toda buena obra.
mirando a Jesús, autor y consumador de nuestra fe, el cual por el gozo que fué puesto delante de él, soportó la cruz, despreciando la vergüenza, y se ha sentado a la diestra de Dios.
HABIENDO pues Cristo padecido en la carne, armaos vosotros también del mismo pensamiento (que Aquel que padeció en la carne, no tiene ya que ver con el pecado),
¶De la misma manera, vosotros los jóvenes, someteos a los ancianos; y todos vosotros, ceñíos de humildad, para servir los unos a los otros; porque Dios resiste a los soberbios, mas da gracia a los humildes.