En seguida los hombres de Judá alzaron el grito; y aconteció que cuando los hombres de Judá alzaron el grito, Dios desbarató a Jeroboam y a todo Israel delante de Abías y de Judá.
Mas sucedió que el día séptimo madrugaron, al despuntar el alba, dieron la vuelta a la ciudad, de la misma manera, siete veces; sólo en aquel día dieron la vuelta a la ciudad siete veces.
Y acontecerá que cuando se prolongare mucho el sonido del cuerno de jubileo, y cuando oyereis el sonido de la trompeta, entonces gritará todo el pueblo con grande algazara; y el muro de la ciudad caerá a plomo, y subirá el pueblo cada uno en derechura de sí.