Y ALCANZABA la suerte de los hijos de la tribu de Judá, conforme a sus parentelas, hasta el confín de Edom; teniendo el desierto de Zin al sur, como extremo del término meridional.
En ese tiempo, pues, Salomón y todo Israel con él, congregación inmensa que venía desde la entrada de Hamat hasta el Arroyo de Egipto, celebraron la fiesta delante de Jehová nuestro Dios por siete días, y otros siete días, esto es, catorce días.
En el lado meridional, de la parte del sur: Desde Tamar hasta las aguas de Meriba-cades, al torrente de Egipto y hasta el Mar Grande. Y éste será el lado meridional, de la parte del sur.
Y de Jerusalem, y de Idumea, y de más allá del Jordán, y de en derredor de Tiro y de Sidón, una muchedumbre inmensa, al oír cuán grandes cosas hacía, acudían a él.
por cuanto prevaricasteis contra mí en medio de los hijos de Israel, junto a las aguas de Meriba-cades, en el desierto de Zin; puesto que no me santificasteis en medio de los hijos de Israel.