Y en aquellos días no había seguridad para aquel que salía, ni para aquel que entraba; sino quebrantos grandes sobre todos los habitantes de estos países.
Si salgo al campo, ¡he aquí los muertos a cuchillo! y si entro en la ciudad, ¡he aquí los enfermos a causa del hambre! pues ya tanto el profeta como el sacerdote andan en torno de la tierra, sin saber a dónde van.
Lo dije, porque oí la difamación de muchos, el terror andaba por todos lados, decían: ¡Decidnos algo contra él, y le denunciaremos! Todos mis amigos familiares están esperando mi caída. ¡Quizás, dicen, será engañado, y prevaleceremos contra él; y tomaremos nuestra venganza en él!
(Dije yo entonces: ¡Ah Jehová, Señor! ciertamente has del todo engañado a este pueblo y a Jerusalem, diciendo: ¡Tendréis paz! en tanto que la espada alcanza ya hasta el alma.)
Declarad esto en Judá, y en Jerusalem dadlo a conocer, diciendo: ¡Tocad la trompeta por la tierra! ¡clamad por todas partes! y decid: ¡Juntaos, y acudid a las ciudades fortificadas!
Mas ¿por qué los veo despavoridos y vueltos atrás? ¡aun sus hombres más esforzados están derribados! ¡huyen apresuradamente, y no miran atrás! El temor se esparce por todos lados, dice Jehová.
Sus tiendas y sus rebaños les serán quitados; sus cortinas y todos sus útiles y sus camellos, los saqueadores los llevarán para sí; y se les clamará: ¡El terror está por todas partes!
He aquí que traeré sobre ti el terror, dice el Señor, Jehová de los Ejércitos, procedente de todos tus alrededores; y seréis expulsados, cada cual en derechura de sí mismo, sin que haya quien recoja los fugitivos.
Dirán: ¿Por qué nos quedamos sentados? Congregaos, y entremos en las ciudades fortificadas, y estaremos allí callados; puesto que Jehová nuestro Dios nos ha reducido a silencio, y nos ha dado a beber agua de hiel, por haber pecado contra Jehová.
TAV.- Tú has proclamado, cual se proclama día de fiesta solemne, mi anuncio de ¡Terrores hay por todos lados! y no hubo en el día de la ira de Jehová quien escapase o fuese dejado. ¡A los que he acariciado en mis manos y los he criado, el enemigo los ha hecho perecer!