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Referencias Cruzadas

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Jeremías 28:4

Biblia Version Moderna (1929)

También haré volver a este lugar a Jeconías hijo de Joaquim, rey de Judá, y a todos los cautivos de Judá que se han ido a Babilonia, dice Jehová; porque yo romperé el yugo del rey de Babilonia.

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20 Referencias Cruzadas  

y por tu espada vivirás, y a tu hermano servirás; mas será que, conforme te vayas libertando, sacudirás su yugo de sobre tu cerviz.

Y llevó en cautiverio a toda Jerusalem, y a todos los príncipes, y a todos los hombres esforzados; diez mil fueron los cautivos, inclusos todos los artesanos y los herreros; no quedó ninguno, a excepción de los más pobres del pueblo del país.

Porque el yugo de su carga, y la vara de su hombro, y el palo del que le oprimía, los has quebrado, como en el día de Madián.

Las ciudades del Mediodía están cerradas, de modo que no hay quien las abra: Judá es llevado en cautiverio todo él; es llevado en cautiverio completamente.

Porque de tiempo muy atrás yo quebré tu yugo, y rompí tus coyundas; y tú dijiste: No transgrediré; en tanto que sobre todo collado elevado, y debajo de todo árbol frondoso, te prostituías, ¡oh ramera!

¡No lloréis al muerto, ni hagáis lamentación por él! ¡llorad sí amargamente al que se ha ido en cautiverio; porque no volverá más, ni verá su tierra natal!

¡Vivo yo! dice Jehová; aunque fuera Conías hijo de Joaquim, rey de Judá, el anillo de sellar sobre mi mano derecha, de allí te arrancaría:

JEHOVÁ me hizo ver una visión: y he aquí que había dos canastos de higos puestos delante del Templo de Jehová, después que Nabucodonosor rey de Babilonia hubo deportado a Jeconías hijo de Joaquim, rey de Judá, y a los príncipes de Judá, con los  artesanos y los herreros, desde Jerusalem, y los hubo llevado a Babilonia.

Así dice Jehová, el Dios de Israel; A semejanza de estos higos buenos, así reconoceré yo a los del cautiverio de Judá, a quienes he enviado desde este lugar a la tierra de los Caldeos, para bien suyo;

Por lo mismo sucederá que la nación o el reino que no le sirviere, es decir, a Nabucodonosor rey de Babilonia, y que no sometiere su cerviz al yugo del rey de Babilonia, a esa nación la castigaré yo con espada y con hambre y con peste, hasta que la haya destruído por mano de él.

¶Entonces Hananías profeta tomó el yugo de sobre la cerviz del profeta Jeremías, y lo rompió.

Así habla Jehová de los Ejércitos, el Dios de Israel, diciendo: ¡Yo rompo el yugo del rey de Babilonia!

Y ESTAS son las palabras de la carta que envió el profeta Jeremías desde Jerusalem al residuo de los ancianos de los del cautiverio, y a los sacerdotes, a los profetas y a todo el pueblo que Nabucodonosor había deportado desde Jerusalem a Babilonia;

(después que hubieron salido de Jerusalem Jeconías el rey, y la reina madre, y los eunucos, y los príncipes de Judá y de Jerusalem, con los artesanos y los herreros);

Y sucederá en aquel día, dice Jehová de los Ejércitos, que haré pedazos el yugo del enemigo de sobre tu cerviz, y romperé tus coyundas: y a mi pueblo los extraños no le reducirán más a servidumbre:

Yo soy Jehová vuestro Dios, que os saqué de la tierra de los Egipcios para que no fueseis siervos de ellos; y rompí las coyundas de vuestro yugo, y os hice andar con cabeza levantada.

sino que ahora quebraré su yugo de sobre ti, romperé sus coyundas.




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