Israel era entonces santidad a Jehová, sus primicias de los frutos: a ¡todos los que le devoran serán tenidos por culpables; vendrá sobre ellos el mal! dice Jehová.
también la fiesta de la Siega de los primeros frutos de tus labores, de aquello que hubieres sembrado en el campo: y la fiesta de la Cosecha, al fin del año, cuando hayas cosechado el producto de tus labores del campo.
Yo me indigné contra mi pueblo, profané mi herencia, y la entregué en tu mano: tú no tuviste de ellos piedad alguna; hasta sobre los ancianos agravaste excesivamente tu yugo.
Así dice Jehová contra todos mis malos vecinos que se apropian la herencia que yo hice heredar a mi pueblo Israel: He aquí que los arrancaré de sobre su tierra, y arrancaré a la casa de Judá de en medio de ellos.
Por tanto todos los que te devoran serán devorados, y todos tus adversarios, si, todos ellos irán en cautiverio; y todos los que te despojan serán despojados, y todos los que te saquean serán saqueados.
Cuantos los hallaban, los devoraban; y sus adversarios decían: No hacemos mal; porque han pecado contra Jehová, habitación que es de justicia; sí, contra Jehová, la esperanza de sus padres.
¡AY de aquellos que están descuidados en Sión, y de los que viven sin recelo en el monte de Samaria, los más notables de la primera de las naciones; a los cuales acude la casa de Israel!
Estoy sumamente indignado contra todas las naciones que están descuidadas; pues que yo tuve un poco de indignación contra ella; mas éstas adelantaron la aflicción.
Porque así dice Jehová de los Ejércitos, el cual para gloria suya me ha enviado a las naciones que os despojan (porque aquel que os toca a vosotros, le toca a él en la niña de su ojo):
porque eres un pueblo santo a Jehová tu Dios; pues a ti te escogió Jehová para que le seas un pueblo de exclusiva posesión, más que todas las naciones que hay sobre la faz de la tierra.
a fin de que él te ensalce sobre todas las naciones que ha hecho, para alabanza y para renombre y para gloria; y a fin de que tú seas un pueblo santo a Jehová tu Dios, como él ha dicho.
Porque pueblo santo eres para Jehová tu Dios; a ti te escogió Jehová tu Dios, para que le seas un pueblo de exclusiva posesión, más que todos los pueblos que están sobre la haz de la tierra.
¶Vosotros, al contrario, sois una raza escogida, un sacerdocio real, nación santa, pueblo de posesión exclusiva; a fin de que manifestéis las excelencias de aquel que os ha llamado de las tinieblas a su luz maravillosa;
Éstos son los que no fueron amancillados con mujeres; porque son vírgenes. Éstos son los que siguen al Cordero por doquiera que vaya. Éstos fueron rescatados de entre los hombres, como primicias para Dios y para el Cordero.