Y él les estaba atento, esperando recibir de ellos alguna cosa.
Entonces Pedro, clavando en él la vista, juntamente con Juan, dijo: Mira a nosotros.
Mas Pedro dijo: No tengo plata ni oro, pero lo que tengo, eso te doy: ¡En el nombre de Jesucristo el Nazareno, levántate y anda!