Y él, mirándole fijamente, y estando sobrecogido de temor, le dijo: ¿Qué es, Señor? Y él le dijo: Tus oraciones y tus limosnas han subido como memorial delante de Dios.
Y viendo esto Pedro, respondió al pueblo: ¡Varones israelitas! ¿por qué os admiráis de esto? ¿o por qué claváis la vista en nosotros, como si por nuestro propio poder o piedad hubiésemos hecho andar a este hombre?