Dijo entonces José al pueblo: He aquí, os he comprado hoy, a vosotros y vuestras tierras, para Faraón. He ahí simiente para vosotros; sembrad pues la tierra;
Asimismo las siete vacas enjutas y feas, que subían después de ellas, siete años son, y también las siete espigas secas, abrasadas del solano; serán siete años de hambre.
Solamente las tierras de los sacerdotes no adquirió; porque los sacerdotes tenían ración prescrita de parte de Faraón, y comían la ración prescrita que les daba Faraón; por eso no vendieron sus tierras.
y será que en la siega, daréis la quinta parte a Faraón, y las otras cuatro partes serán vuestras, para sembrar los campos, y para vuestra manutención y la de los que están en vuestras casas, y como alimento para vuestros niños.
Por la mañana siembra tu simiente, y a la tarde no retires tu mano; por que no sabes cuál ha de prosperar, si esto o aquello; o si ambos a dos serán juntamente buenos.
Porque de la manera que desciende la lluvia, y la nieve, del cielo, y no vuelve allá, sino que riega la tierra, y la fecunda, y la hace producir, de modo que dé simiente al que siembra, y pan al que come;
Y el que suministra simiente al sembrador, y pan para manutención, suministrará y multiplicará vuestra simiente para sembrar, y aumentará los productos de vuestra justicia;