Entonces se acercaron las siervas, ellas y sus niños, y se postraron.
Y como alzase Esaú los ojos, vió las mujeres y los niños, y dijo: ¿Quiénes son estos que vienen contigo? Y él respondió: Son los niños con que Dios ha hecho merced a tu siervo.
Luego se acercó también Lea con sus niños, y se postraron; y después se acercaron José y Raquel, y se postraron.