Y mandó al segundo también, y también al tercero, y asimismo a todos los que iban tras las manadas, diciendo: En estos mismos términos hablaréis a Esaú cuando le encontrareis.
Y diréis también: He aquí, tu siervo Jacob viene en pos de nosotros. Porque decía: Aplacaré su ira con el presente que va delante de mí; después de esto veré su rostro; quizás me mirará benignamente.