Y concibió otra vez y parió un hijo; y dijo: Ahora esta vez quedará mi marido unido conmigo; porque le he parido tres hijos: por tanto fué llamado Leví.
Mas ella le respondió: ¿Es tan poca cosa el haberte tú llevado mi marido, que quieras llevarte también las mandrágoras de mi hijo? Dijo Raquel: Por tanto se acostará contigo esta noche, a trueque de las mandrágoras de tu hijo.
De Efraim vienen los radicados en la serranía de Amalec: tras de ti, Efraim, viene Benjamín entre tus tropas. De Maquir bajan jefes, y de Zabulón los que manejan vara de magistrado.
¶Entonces dijo Saúl: Así diréis a David: No desea el rey dote alguna, sino cien prepucios de Filisteos, para vengarse de los enemigos del rey. Mas Saúl pensaba hacer caer a David por mano de los Filisteos.