Y él dijo: ¿Quién te ha dicho que estabas desnudo? ¿Has comido del árbol del cual te mandé que no comieses?
Y él respondió: Oí tu voz en el jardín, y tuve miedo, porque estaba desnudo, y me escondí.
Y dijo el hombre: La mujer que pusiste aquí conmigo me dió del árbol, y comí.
Y dijo Jehová: ¿Qué has hecho? la voz de la derramada sangre de tu hermano clama a mí desde la tierra.
Estas cosas has hecho, y yo he guardado silencio: pensabas por eso que de cierto seria yo tal como tú: pero te reprenderé, y pondré en orden tus delitos delante de tus ojos.
Por tanto, por obras legales ninguna carne será justificada delante de él; porque por medio de la ley es el conocimiento del pecado.