habita temporalmente en esta tierra, y estaré yo contigo y te bendeciré; porque a ti y a tu simiente daré todas estas tierras, y estableceré contigo el juramento que juré a Abraham tu padre;
Y Dios respondió: Sin embargo, de cierto Sara tu mujer te parirá hijo, y le darás el nombre de Isaac; y estableceré mi pacto con él por pacto eterno, y con su simiente después de él.
Y te daré a ti, y a tu simiente después de ti, la tierra de tus peregrinaciones, a saber, toda la tierra de Canaán, por posesión para siempre; y seré el Dios de ellos.
Y le apareció Jehová aquella noche, y dijo: Yo soy el Dios de Abraham tu padre; no temas, porque contigo soy yo, y te bendeciré, y multiplicaré tu simiente por causa de Abraham mi siervo.
y he aquí, Jehová estaba en lo más alto de ella, y dijo: Yo soy Jehová, el Dios de Abraham tu padre, y el Dios de Isaac; la tierra en que estás acostado, te la daré a ti y a tu simiente.
Y he aquí que yo seré contigo, y te guardaré dondequiera que anduvieres, y te haré volver a esta tierra; porque no te dejaré hasta tanto que haya cumplido lo que he prometido acerca de ti.
Y José dijo a sus hermanos: Yo me muero; mas Dios de seguro os visitará, y os hará subir de esta tierra a la tierra que tiene jurada a Abraham, a Isaac y a Jacob.
Y dijo Dios: Vé, porque yo estaré contigo; y esto te será la señal de que yo te he enviado: Cuando hayas sacado al pueblo de Egipto, serviréis a Dios en este monte.
Os traeré también a la tierra acerca de la cual alcé mi mano jurando dársela a Abraham, a Isaac y a Jacob; y os la daré a vosotros en posesión. Yo Jehová.
Cuando pasares por las aguas, estaré yo contigo, y si por los ríos, no te anegarán; cuando anduvieres por en medio del fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti:
Dios no es hombre para que mienta, ni hijo de Adam, para que mude de propósito. ¿Ha dicho él, y acaso no lo hará? ¿o ha hablado, y dejará de cumplir su palabra?
Ved que pongo delante de vosotros la tierra; entrad, poseed la tierra que juró Jehová a vuestros padres, a Abraham, a Isaac y a Jacob, que se la daría a ellos y a su descendencia después de ellos.
Y le dijo Jehová: Ésta es la tierra de que juré a Abraham, a Isaac y a Jacob, diciendo: A tu simiente la daré: te he permitido verla con tus ojos, mas no puedes pasar allá.
Por fe habitó como extranjero en la tierra de la promesa, como en tierra extraña, morando en tiendas con Isaac y Jacob, coherederos de la misma promesa:
Por lo cual, queriendo Dios mostrar, con mayor abundancia de certidumbre, a los herederos de la promesa la inmutabilidad de su propósito, interpuso sujuramento;