A la mañana, pues, madrugó Abraham, y tomó pan y un odre de agua, y lo dió a Agar, poniéndolo sobre su hombro; dióle también el niño, y la despidió; y ella anduvo vagando en el desierto de Beer-seba.
ENTONCES salieron todos los hijos de Israel, y la Congregación fué reunida como un solo hombre, desde Dan hasta Beer-seba, juntamente con la tierra de Galaad, a Jehová en Mizpa de Benjamín.