Y los bendijo Dios; y les dijo Dios: Sed fecundos y multiplicaos y henchid la tierra y sojuzgadla; y tened dominio sobre los peces del mar, y sobre las aves del cielo, y sobre todos los animales que se mueven sobre la tierra.
que bendiciendo te bendeciré, y multiplicando multiplicaré tu simiente como las estrellas del cielo, y como las arenas a la orilla del mar; y tu simiente poseerá la puerta de sus enemigos;
Y los bendijo en aquel día, diciendo: En tu nombre bendecirá Israel, diciendo: ¡Haga Dios que seas como Efraim y como Manases! De esta suerte puso a Efraim antes de Manasés.
tomad mujeres y engendrad hijos e hijas; y tomad mujeres para vuestros hijos, y dad vuestras hijas a maridos, para que críen hijos e hijas; y multiplicaos allá y no os dejéis disminuir.
Un río de fuego procedía y salía de delante de él; millares de millares ministraban delante de él, y millones de millones en su presencia se levantaban; el Juez se sentó, y los libros fueron abiertos.
y los dejaréis por herencia para vuestros hijos después de vosotros, como posesión hereditaria: para siempre podréis tener a los tales por siervos. Empero de vuestros hermanos, los hijos de Israel, no os enseñoreéis el uno del otro con rigor.