Y vino uno que escapó, y avisó a Abram el Hebreo, el cual habitaba en el encinar de Mamré amorreo, hermano de Escol y hermano de Aner, que eran aliados de Abram.
Ahora pues, júrame por Dios, aquí mismo, que no te portarás falsamente conmigo, ni con mi hijo, ni con mi posteridad; sino que conforme a la bondad que yo he usado contigo, así lo harás tú conmigo, y con la tierra en donde has habitado.