Quizás habrá cincuenta justos en medio de la ciudad; ¿es así que tú destruirás y no perdonarás el lugar amor de los cincuenta justos que hubiere dentro de él?
Así dice Jehová respecto de este pueblo: De esta manera les gusta andar vagando; no han refrenado sus pies; por tanto Jehová no se complace en ellos: ahora traerá a memoria sus iniquidades, y castigará sus pecados.
Por lo cual convenía que en todo fuese semejado a sus hermanos, a fin de que les fuese un sumo sacerdote misericordioso y fiel, en lo perteneciente a Dios, para hacer propiciación por los pecados del pueblo.
Entonces recibió David de mano de Abigail lo que ella le había traído; y le dijo: Sube en paz a tu casa: mira que he admitido tu ruego, y he aceptado tu persona.