Y estableceré mi pacto entre mí y ti, y tu simiente después de ti en sus generaciones sucesivas, por pacto eterno, de ser yo tu Dios, y el de tu simiente después de ti.
Indispensablemente será circuncidado el nacido en tu casa y el comprado con tu dinero; así estará mi pacto en vuestra misma carne como pacto sempiterno.
Y Dios respondió: Sin embargo, de cierto Sara tu mujer te parirá hijo, y le darás el nombre de Isaac; y estableceré mi pacto con él por pacto eterno, y con su simiente después de él.
Y le apareció Jehová aquella noche, y dijo: Yo soy el Dios de Abraham tu padre; no temas, porque contigo soy yo, y te bendeciré, y multiplicaré tu simiente por causa de Abraham mi siervo.
y he aquí, Jehová estaba en lo más alto de ella, y dijo: Yo soy Jehová, el Dios de Abraham tu padre, y el Dios de Isaac; la tierra en que estás acostado, te la daré a ti y a tu simiente.
Y volvió Dios a decir a Moisés: Así dirás a los hijos de Israel: JEHOVÁ, el Dios de vuestros padres, el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob, me ha enviado a vosotros. Este es mi nombre para siempre, y este es mi memorial de siglo en siglo.
Díjole además: Yo soy el Dios de tu padre, el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob. Entonces cubrióse Moisés el rostro, porque tuvo temor de mirar a Dios.
Porque yo, Jehová, amo la justicia; aborrezco la rapiña para holocausto; mas a aquellos les daré su recompensa fielmente; haré con ellos un pacto eterno.
y habitarán confiadamente en ella, y edificarán casas, y plantarán viñas; sí, habitarán confiadamente, cuando yo hubiere ejecutado juicios contra todos aquellos que los desprecian por todos lados: y conocerán que yo soy Jehová.
Mas ni aun por todo esto, estando ellos en la tierra de sus enemigos, los habré desechado, ni los habré detestado, de manera. que los destruyera, anulando mi pacto con ellos; por cuanto soy Jehová su Dios;
sino que me acordaré a favor de ellos del pacto de sus antepasados, a quienes saqué de la tierra de Egipto, a vista de las naciones, para ser su Dios. Yo Jehová.
en que anduvisteis en un tiempo, conforme al uso de este siglo, conforme al príncipe de la potestad del aire, espíritu que ahora obra en los hijos de la desobediencia:
a fin de confirmarte hoy por pueblo suyo, y para que él sea tu Dios, como te ha prometido, y como él ha jurado a tus padres, a Abraham, a Isaac y a Jacob.
Ahora empero anhelan otra patria mejor, es decir, la celestial: por le cual Dios no se avergüenza de ellos, para llamarse Dios suyo; porque les tiene preparada una ciudad.
Porque este es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice el Señor: Pondré mis leyes en su mente, y en su corazón las escribiré; y yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo:
EL Ángel de Jehová subió entonces de Gilgal a Boquim, y dijo: Yo os hice subir de Egipto, y os traje a la tierra que tenía jurada a vuestros padres y dije: No quebrantaré mi pacto con vosotros.