Ahora pues, mi padre os impuso un yugo pesado, pero yo añadiré todavía más sobre vuestro yugo; mi padre os castigó con látigos, yo empero os castigaré con escorpiones.
¶Con lo cual se vieron los capataces de los hijos de Israel en aflicción, cuando les fué dicho: No rebajaréis nada de vuestros ladrillos de día en día.
EN seguida volvíme, y me puse a observar las opresiones que se hacen debajo del sol: y he allí las lágrimas de los oprimidos, y ellos no tenían consolador; pues que de parte de sus opresores estaba la potestad; de modo que ellos no tenían consolador.
En cuanto a su padre, por lo mismo que practicó la extorsión, despojó fraudulentamente a su hermano, y lo que no es bueno hizo en medio de su pueblo; he aquí que murió por su iniquidad.