¶Luego puso el altar de oro dentro del Tabernáculo de Reunión, delante del velo;
y colocarás el altar de oro para el incienso enfrente del Arca del Testimonio; y pondrás la cortina a la entrada del Tabernáculo.
y mojando el sacerdote su dedo en la sangre, rociará de aquella sangre siete veces delante de Jehová, enfrente del velo del Santuario.
¡Insensatos y ciegos! ¿cuál pues es mayor, la ofrenda, o el altar que santifica la ofrenda?
Y yo sabía que me oyes siempre, mas a causa de la multitud que está presente, lo dije, para que ellos crean que tú me has enviado.
PORQUE la ley, teniendo meramente una sombra de los bienes venideros, no la imagen misma de las cosas, por medio de los mismos sacrificios, ofrecidos año por año, nunca puede perfeccionar a los que así se acercan a Dios:
Por lo cual también, puede salvar hasta lo sumo a los que se acercan a Dios por medio de él, viviendo siempre para interceder por ellos.
HIJITOS míos, estas cosas os escribo, para que no pequéis. Y si alguno pecare, abogado tenemos para con el Padre, a saber, a Jesucristo el justo;