Tomando entonces Zípora un pedernal afilado, cortó el prepucio a su hijo, y lo arrojó a sus pies, diciendo: Ciertamente me eres un esposo sangriento.
Mas en cuanto al varón incircunciso, que no tuviere circuncidada la carne de su prepucio, el alma aquella será cortada de entre su pueblo; ha quebrantado mi pacto.
Y de esta manera decía Simei en sus maldiciones: ¡Afuera! ¡afuera! ¡oh hombre sanguinario y hombre de Belial!
Por lo cual tomó Jetro suegro de Moisés, a Zípora mujer de Moisés (después de haber sido enviada a su padre),
Y convino Moisés en quedarse con aquel hombre; y él dió a Moisés su hija Zípora por mujer;
Y Jehová le soltó: entonces fué cuando ella dijo: Esposo sangriento; con motivo de la circuncisión.