Biblia Todo Logo
Referencias Cruzadas

- Anuncios -




Éxodo 23:6

Biblia Version Moderna (1929)

¶No pervertirás el derecho de tu gente pobre en su pleito.

Ver Capítulo Copiar

23 Referencias Cruzadas  

Ahora pues, permanezca sobre vosotros el temor de Jehová: tened cuidado y hacedlo así; porque para con Jehová nuestro Dios no hay maldad, ni acepción de personas, ni admisión de cohechos.

Si he tenido en poco el derecho de mi siervo, o de mi sierva, cuando hayan contendido conmigo;

No es bueno aceptar la persona de los inicuos, para pervertir el derecho del justo en el juicio.

No robes al pobre porque es pobre, ni atropelles en juicio al desgraciado

no sea que bebiendo, se olviden de la ley, y perviertan el derecho de cualquiera de los afligidos.

¶Si vieres la opresión de los pobres, y la perversión de juicio y de justicia en alguna provincia, no te turbes a causa de esto; porque sobre el alto otro más alto vigila, y sobre ellos, el Altísimo.

los que justifican al inicuo mediante una dádiva; y en cuanto al derecho del justo, se lo quitan!

Se han puesto gordos y lustrosos; y sobresalen en hechos de maldad; no defienden la causa, del huérfano, y sin embargo prosperan; y no mantienen el derecho de los menesterosos.

Todos ellos son rebeldes porfiadísimos, que andan chismeando; puro bronce y hierro son, todos ellos son corruptores.

si no oprimiereis al extranjero, al huérfano y a la viuda; si no derramareis la sangre inocente en este lugar, ni anduviereis tras otros dioses para vuestro propio perjuicio;

¶No hagas injusticia en el juicio; ni aceptarás la persona del pobre, ni honrarás la cara del grande: con justicia juzgarás a tu prójimo.

Y yo me acercaré a vosotros para juicio; y seré veloz testigo contra los hechiceros, y contra los adúlteros, y contra los que juran en falso, y contra los que defraudan al jornalero de su salario, y oprimen a la viuda y al huérfano, y apartan al extranjero de su derecho; y no me temen a mí, dice Jehová de los Ejércitos.

No torcerás el derecho, no harás acepción de personas, ni admitirás los regalos; que el regalo ciega los ojos de los sabios, y pervierte las palabras de los justos.

¡Maldito aquel que torciere el derecho del extranjero, del huérfano, y de la viuda! Y dirá todo el pueblo: ¡Amén!

Pero los hijos de Samuel no anduvieron en los caminos de él, sino que declinaron tras el interés, y admitieron los regalos, y pervirtieron el derecho.




Síguenos en:

Anuncios


Anuncios