Le preguntaron también los soldados, diciendo: Y nosotros, ¿qué hemos de hacer? Y les dijo: No hagáis violencia a nadie, ni defraudéis a ninguno con falsía; y estad contentos con vuestras pagas.
para los fornicarios, para los sodomitas, para los que hurtan a hombres, para los mentirosos, para los perjuros, y para cualquiera otra cosa que haya contraria a la sana doctrina;
¶Hermanos, no habléis mal los unos contra los otros. El que habla contra su hermano, o juzga a su hermano, habla contra la ley, y juzga a la ley. Pero si tú juzgas a la ley, no eres ya guardador de la ley, sino juez.