Dijo entonces tu sierva: Ruégote que la respuesta de mi señor el rey sea tranquilizadora; puesto que como un ángel de Dios, así es mi señor el rey para entenderse en lo bueno y lo malo. ¡Y Jehová tu Dios sea contigo!
Y dijo Dios: Vé, porque yo estaré contigo; y esto te será la señal de que yo te he enviado: Cuando hayas sacado al pueblo de Egipto, serviréis a Dios en este monte.
CUANDO salieres a la guerra contra tus enemigos, y vieres caballos y carros, y gente mas numerosa que tú, no has de temerlos; porque Jehová tu Dios es contigo, el mismo que te hizo subir de la tierra de Egipto.
(yo mediaba entre vosotros y Jehová en ese tiempo, para poneros delante la palabra de Jehová; porque temisteis a causa del fuego, y no subisteis al monte), y dijo así: