He aquí, Jehová os ha dado el día del descanso, por tanto en el sexto día os da el pan de dos días. Estése cada hombre en su estancia; no salga nadie de su lugar en el día séptimo.
Seis días se trabajará; mas en el día séptimo habrá un descanso solemnísimo, convocación santa; ningún trabajo haréis en él; descanso consagrado a Jehová será en todas vuestras habitaciones.