Y sucedió que cuando oyeron esto todos nuestros enemigos, y lo vieron todas las naciones que estaban en nuestros alrededores, decayeron mucho a sus propios ojos; y conocieron que por nuestro Dios había sido hecha esta obra.
EN aquel día el rey Asuero dió a la reina Ester la casa de Hamán, adversario de los Judíos. Mardoqueo también vino delante del rey, porque Ester le había dicho al rey lo que él era para ella.
¶Si vieres la opresión de los pobres, y la perversión de juicio y de justicia en alguna provincia, no te turbes a causa de esto; porque sobre el alto otro más alto vigila, y sobre ellos, el Altísimo.