Si pluguiere pues al rey, expídase orden real de su parte, y escríbase entre las leyes de los Persas y Medos, para que no se mude: Que Vasti no venga más a la presencia del rey Asuero; y en cuanto a su dignidad real, déla el rey a otra que sea mejor que ella.
Y así, cuando el edicto del rey, el que va a hacer, fuere conocido en todo su reino, por grande que sea, todas las mujeres darán honra a sus maridos, desde el mayor hasta el menor de ellos.
y envió cartas a todas las provincias del rey, de provincia en provincia, conforme a la escritura de ella, y de pueblo en pueblo conforme a su lengua, ordenando que todo hombre sea señor en su propia casa, y publique el hecho según el lenguaje de su pueblo.