Y ACONTECIÓ que a los treinta años (de edad), en el mes cuarto, al cinco del mes, estando yo en medio de los cautivos, junto al río Kebar, fueron abiertos los cielos, y tuve visiones de Dios.
¶Y en cuanto a estos cuatro muchachos, Dios les concedió conocimiento e inteligencia en todas las letras y la sabiduría de los Caldeos; Daniel también era inteligente en toda suerte de visiones y sueños.
Y yo Daniel solo ví la visión; pues no la vieron los hombres que conmigo estaban; sino que cayó sobre ellos un terror grande, de modo que huyeron, y se escondieron.
Mas después que se haya levantado, será quebrado su reino, y será repartido hacia los cuatro vientos del cielo, pero no a su posteridad; ni conforme al dominio suyo que él ejerció; porque su reino será arrancado de raíz, y quedará para otros fuera de aquéllos.
EN el primer año de Belsasar rey de Babilonia, vió Daniel un sueño y visiones de su cabeza sobre su cama. Entonces escribió el sueño, y refirió la suma de las cosas.
¶Aquí tuvieron fin sus palabras. En cuanto a mí, Daniel, mis pensamientos me turbaron mucho, y palideció mi rostro: pero guardé el asunto en mi corazón.
Yo ví pues en la visión (y fué así que al verla, estaba en Susán, la metrópoli, que está en la provincia de Elam); y ví en la visión, estando junto al río Ulai.
en el año primero de su reinado, yo Daniel llegué a entender por medio de los libros, la cuenta de los años de que había revelado Jehová al profeta Jeremías, que hubiesen de cumplirse setenta años de las desolaciones de Jerusalem.